El origen de la chipa se remonta a la época en que el trigo no estaba presente en América del Sur y la yuca era el almidón más utilizado en la zona. En la época colonial, los misioneros jesuitas introdujeron la leche, los huevos y el queso a los indígenas, que finalizaron la receta de la chipa.
Las chipas tradicionales se hacen solo con queso, pero diferentes variedades pueden tener jamón u otros embutidos en el relleno. Puede utilizar queso parmesano solo o una combinación de quesos duros y semiduros, como el manchego, suizo o varios quesos latinoamericanos.
El uso de almidón de yuca y manteca de cerdo da como resultado el exterior crujiente del panecillo, mientras que el uso de anís le da a los panecillos un sabor inusual y único.
En Argentina las chipas son preparadas básicamente como bollos de queso horneados y son muy populares. Estos bollos están hechos con harina de yuca (tapioca). Esta harina, también conocida como almidón de mandioca o tapioca, es muy ligera y se puede encontrar en tiendas naturistas o mercados hispanos.
Para la gente de Paraguay, las chipas representan el pan de cada día que se come junto con numerosas comidas principales o como refrigerio. Tradicionalmente, los bollos se preparan en casa, pero también los venden muchos vendedores ambulantes.
En realidad, este plato emblemático de la región forma parte de ambas culturas, y se puede decir que su origen pertenece a América Latina, puesto que cuando fue creado todavía no existían ambos países, y todo el territorio formaba parte de España.