Descripción
Se trata de un queso normalmente vendido en forma circular en su zona superior e inferior, con los laterales convexos; de tipo semiduro que puede cortarse con facilidad, cuyo peso oscila entre los 2.5 y 30 kg.
Sin embargo, también es posible conseguirlo en forma de bloque rectangular ancho, con un peso inferior al anterior, situándose entre los 2.5 y 5 kg.
Ya sea que se encuentre con corteza dura a base de una pequeña capa de aceite vegetal, o sin corteza, lo que no varía mucho es su color amarillento o ligeramente pajizo en función a su tiempo de maduración.
Y su sabor que es medianamente dulzón. De apariencia mantecosa que se endurece con el paso del tiempo; y según sus consumidores, mientras más añejo mejor.
Curiosidades
Si bien es cierto que el originalmente denominado queso Gouda era un tipo de queso Neerlandés, actualmente se emplea genéricamente, y no necesariamente para referirse a aquellos quesos provenientes del país.
Sobre este, se aconseja al comensal, consumirlo tras mínimo 5 semanas, para que lo disfrute a plenitud.
Respecto a sus propiedades, su consumo regular aporta vitaminas del A, D y pertenecientes al complejo B —B1, B2, B9 Y B12—, calcio y múltiples proteínas.
Por lo que de modo general, colabora para el mantenimiento del sistema óseo y muscular, favoreciendo la regeneración de los distintos tejidos del cuerpo humano.
En cuanto a sus usos, los Goudas maduros sirven como relleno para panes, e incluso a modo de bocadillos en celebraciones familiares. Mientras que los más tiernos se emplean para hamburguesas o hot dogs.